Su paquete, solo regáleme
la firmita por acá, que le parece
ya llegó su caja de sorpresas,
¡Felicidades!
Caja de sorpresas - María Prétiz
Yo pasaba al frente de aquella luz
en medio de esta ciudad oscura
y miraba como si algo me llamara
o me clavara la mirada desde adentro.
El día que tropezando acudí al llamado
encontré en la luz una caja de sorpresas
con un pedido que había hecho hace tiempo.
Lo que pasa es que soy muy modesta
y pidiendo con miedo, el encargo llegó a medias.
En un principio se veía tan humano,
pese a que en su cara se delataba un poco
las marcas de un artista iluminado.
Con todo y simulacros de historias de amor,
el negocio parecía más un milagro.
Pero como todo objeto artificial
traía un defecto de fábrica.
No se podía enamorar
de mí, al menos
Y sigue dándome historias de amor,
pero solo duran tres minutos.
Por eso, acepto mi caja en entrega parcial
y como María, me voy de voluntaria
en una caja de sorpresas
para alguien.
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